12 septiembre 2008

Spa'stillado

La falta de sueño me estaba matando literalmente. El trastorno sufrido por el poco descanso traía consecuencias horribles, como quedarme dormido en el bondi y seguir viaje hasta Benavidez a las dos de la mañana, o bien distraerme en el laburo y la facultad pensando en si hacerme de las divinas ó de las populares.
Llevaba más de un mes a ritmo arrollador, pasando hasta dieseis o diecisiete horas en la calle, y durmiendo por noche apenas cuatro o cinco horas con algo de suerte. Mi cuerpo, por supuesto, me estaba haciendo pagar los platos rotos y para el momento que dije: "Basta", debía ejecutar el plan de acción.
Aconsejado por mi progenitor, me dirigí hacia un local de yuyos, de esos oscuros y olientes a pachuli y pedo de vieja en busca de una solución. Al ingresar, una joven de pollera gastada me recibió con una taza de té en la mano, y una sonrisa de muñeca tallada en el rostro. Aunque su mirada parecía algo perdida y no generaba mucha confianza que digamos, le conté qué me había traído hasta allí mientras el humo del sahumerio me jugaba una mala pasada, e instantes más tarde hizo su oferta.
Me mostró todo tipo de pastos que, ahogados en agua hirviendo, mejorarían mi rendimiento mental y físico en un par de sorbos. Sacó frascos, paquetes, cajas y bolsitas, enseñándome con mucho cuidado las virtudes y ventajas de cada uno de sus productos. Finalmente, después de media hora de divagar por el negocio, puso en mi mano un paquete con píldoras casi tan mágicas como el viagra, acusándolas de ser un reconstituyente nervioso que curaría mis males.
Cuando le pregunté por qué me había mostrado todo el yuyaje hippie sabiendo de antemano que acabaría por darme pastillas capitalistas, contestó un claro "Es que estas mierdas no me las compra nadie". Le contesté con una mueca, le tendí un Belgrano, tomé el vuelto y me dirigí a mi casa, a contramano de la ciudad, que ya empezaba a apagarse.
Sospecho que los resultados ya están a la vista: tengo una nueva adicción además de las ya conocidas como el mantecol, la coca cola y los cigarrillos; Ya no me duemo en el sesenta a la noche, pese a las dos horas y media de recorrido hacia mi techo. Ya casi que volví a mi óptimo rendimiento laboral y aunque no sé bien si es culpa de las pastilocas o si es que el efecto placebo es de repente mi mejor amigo. Lo que sí sé con seguridad es que pese a un montón de cosas, en mi decisión no hay vuelta atrás y no tiene ningún tipo de negociación: Digan lo que digan, ya elegí por las populares.

16 comentarios:

Ari dijo...

¡¡Drogado!! Después pasame el nombre de las pastillitas que ya se me terminó mi semana de vacaciones y tengo que retomar con todo.






Acabo de volver de una despedida de soltero, los stripers estaban un poco buenos capáz...

Julián Torrado dijo...

Ari:
Alzada! ¿Tocaste algo por lo menos?

Dedicado para Cbdíaz, que se quejaba de mis textos eternamente metafóricos

besous

Ari dijo...

¡Ni loca! Me muero de la vergüenza.

...::Ameliah::... dijo...

Ajajajaja... Guarda con los efectos secundarios!!!
Mi vieja una vez probo con tomar Fosfovita para ver si le servia para la memoria... Pero siempre se olvidaba de tomarlas... Triste, pero veridico... xDDDD
Besote!

ccccc dijo...

Chulian, deja las pastilocas. Fin

Jania dijo...

empastillado!!! jajaja no te mal acostumbres a las pastilocas...

besos

Akasha! dijo...

Los yuyos sirven! sirven!! lo juro!

Yo tuve insomnio por muuuucho tiempo y empece a tomar infusiones de...(creo) valeriana, o simil...a mi me funcionaron.

Quizas fue medio placebo, who knows...but...who cares?! :)

Dale, deja las pastillas y venite a tomar el te de yuyos...puedo ponerle un poquito de miel si queres!

Anónimo dijo...

a nadie

perdón por la respuesta tardía, pero así de mucho hace que no me meto en el coso mío

saludos

Anónimo dijo...

"Droga, droga, muera la droga
A nadie sirve lo que ofrece
No le damos cabida
Droga, droga, muera la droga
A nadie sirve su mentira
Nos arruina la vida."

Nunca más cerca de la verdad estos versos de la poeta brasilera María da Graça Meneghel...

Espero que te haga reflexionar...

Besos

Claris

Anónimo dijo...

Esa era la hermana del Pity de intoxicados.

Lo que tomaste era efedrina.

te hiciste de las populares... porque en la esquina del rosarino paran las divinas como "la Ruth".

otra vez se me olvidooooooooooooooooo lo que queria escribir :(.


ya fueh otra vez será :p
me olvide mal!.

Anónimo dijo...

Me puse a analizaar... porque Rosarino.... si soy soy de Rosario!!!... Yo no quiero un No en mi Titulo Como Habitante de esta CIudad.


rosariNO .... Porque no puede ser

rosariSi

Ari dijo...

Uhhh, primo. ¿Vos estás tomando de las pastillitas de Juli?

Cecilia Díaz dijo...

Gracias !!!

Tiene aire el texto!!!!

Saludos!

Evil dijo...

Ciencia Vs Fe...
Creer o reventar...
No se me ocurre nada que no sea cliché jaaja!

Suerte con esos caramelos
Saludos!!!

pixie dijo...

jajajaja convida bolu!

yo ando necesitando de eso para tener mas energía!


(pasa la dire :P)

Eli dijo...

y los efectos secundarios???

:P